¿Su empresa va contratar un proveedor de tecnología en la nube y tiene dudas de lo que es importante considerar o no? Preparamos este artículo con algunos tips para que su empresa esté atenta en el momento de contratar un proveedor.
¿Qué es un proveedor de servicios en la nube?
Los proveedores de almacenamiento en la nube son los encargados de gestionar nubes públicas y privadas, así como los recursos de cloud computing como aplicaciones, servidores y almacenamiento.
1- ¿Cuál es el tipo de nube que mi empresa necesita?
Existen algunos tipos de servicios en nube, los más comunes son las nubes Públicas, Privadas e Híbrida. Un buen proveedor debe conocer el perfil de uso del cliente para sugerir los tipos y modelos de nube más adecuados para cada necesidad.
Nube Pública:
Tiene implantación simples y rápida, se acostumbra a ofrecida por proveedores que poseen y operan con la infraestructura en sus data centers. Inicialmente utilizada para las aplicaciones secundarias, como en el hospedaje de sitios web, e-mails y etc.
Nube Privada:
Es usada para incorporar la infraestructura exclusiva de una empresa. Dispone de un data center interno (privado) y autonomía en el ambiente para controlar sus aplicaciones, proporcionando seguridad y mayor agilidad en la respuesta a demandas específicas. Es ideal para empresas con una rápida expansión o que tiene foco en gobernabilidad.
Nube Híbrida:
Es una mezcla las ventajas de las anteriores nubes, presentando, por tanto, una diversidad mayor de usos. Permite la elección de almacenamientos críticos en una aplicación privada y, al mismo tiempo, mantiene recursos ampliados, así como en la nube pública, por ejemplo.
2 - ¿Cómo gerenciar mi ambiente TI?
Cada proveedor cloud trabaja de una manera diferente durante el gerenciamiento de servicios o aplicativos hospedados en la nube, diferente de cuando utilizamos una infraestructura local. De la misma forma cada uno de ellos tienen una visión de hardware local, así que luego de tener un proveedor que ofrezca una herramienta para gerenciar el ambiente en nube, de manera simple y optimizada será importante definir una política de gobierno de TI.
3- ¿Cuándo es necesario escalar de manera manual, automática o programada?
Antes de migrar sus aplicaciones a la nube es preciso evaluar cuál es el tiempo de respuesta que usted espera. Algunos proveedores de cloud computing entienden automáticamente que es preciso aumentar su escala de demanda en un determinado tiempo. Otros van a ofrecer una escala manual, automática o programada, o hasta las tres opciones para optimizar su utilización.
Esté atento al tipo de servicio que será contratado, principalmente si su empresa tiene alguna estacionalidad que necesite aumentar de un momento para otro la disponibilidad, como puede ocurrir con un e-commerce o en situaciones como si su empresa llegase a ofrecer alguna promoción.
4- ¿Cuánto el soporte está incluido en el contrato? ¿Existe soporte en multi-lenguaje?
Recordemos que la mayoría de los proveedores de nube son extranjeros y utilizan la lengua inglesa para comunicarse. En el mundo de la tecnología, tener un soporte en inglés no es un gran problema, pues muchas empresas exigen que sus profesionales sean por lo menos bilingüe, lo que hace la preocupación con el soporte en otra lengua sea la menor.
Ahora algo importante que considerar es la forma de contratación de este soporte. ¿El será on-line, vía telefónica o presencialmente para solucionar mejor las dudas? ¿Este soporte está incluso en el contrato firmado con el proveedor? ¿Cuántas veces puede ser utilizado este soporte? ¿Existe algún límite mensual? Es óptimo realizar estas preguntas en el momento de la contratación, para no ser tomado por sorpresa cuando realmente se necesite el soporte.
Segundo plan
Recomendamos que antes de iniciar a su jornada del viaje hacia la nube, usted junto con su empresa debe buscar los criterios de servicio ofertados por el proveedor elegido. Es fundamental estar atento a las opciones de backup de datos y los temas relacionados a la seguridad que se ofrece, esto debe ser evaluado en un segundo plano en caso de presentarse alguna emergencia.