Ciberseguridad: tecnologías que ayudan a la protección de datos
Con el momento actual, en que se ha adoptado el distanciamiento social y un régimen laboral más amplio del Home Office, los CIO, grupo corporativo y profesionales de la tecnología comprenden que la seguridad de la información es un factor extremadamente importante. Para ello, se mantiene una constante investigación, buscando asegurar la gestión de vulnerabilidades y protección de datos, mientras se mitigan posibles impactos que afecten el negocio de manera negativa.
Entre las precauciones fundamentales para garantizar la seguridad de la información de las empresas, en este artículo hablaremos de algunas medidas necesarias, tanto para este momento pandémico, como para adaptarse a la “nueva normalidad” y tendencia de transformación digital.
Tecnologías y herramientas que pueden respaldar los negocios
Con la LGPD (Ley General de Protección de Datos), muchas empresas ya se están adaptando y buscando alcanzar la madurez en relación a la seguridad de sus datos, no solo para cumplir con la normativa, sino también para la protección de su información, que se ha convertido en un bien preciado en un mundo cada vez más digital y competitivo:
En este contexto, existen herramientas y tecnologías importantes e inteligentes que ayudan en el proceso para alcanzar nuevas alturas en seguridad corporativa. Descubre algunos ejemplos:
- Herramientas para realizar mapeos de seguridad, asignando una puntuación de riesgo cibernético a la estructura de TI en la empresa;
- Tecnologías de protección en trabajo remoto instaladas en endpoints, como sistemas que identifican comportamientos sospechosos, herramientas para prevenir fugas de datos y aplicaciones de detección de amenazas;
- Mejoría de la protección del perímetro y las conexiones para el tráfico de información, utilizando Firewall de próxima generación, API y VPN para intercambiar información y proteger las transacciones digitales;
- Gestión adecuada de accesos y identidades, con la implementación de IDM (Internet Download Manager) que maneja adecuadamente la creación, revisión y desactivación de credenciales y permisos de usuario;
- Gestión de configuraciones de seguridad en la nube, con tecnologías para brindar la visibilidad necesaria y asegurar la aplicación de políticas de seguridad también en el perímetro ampliado.
Protección en el trabajo a distancia
Con el régimen de trabajo a distancia, es fundamental que las organizaciones se ocupen de la protección, dando prioridad a los modelos y herramientas existentes. Además, es fundamental mantener los equipos al tanto de la ciberseguridad, y de los posibles riesgos en este escenario, extendiendo los modelos de seguridad de la empresa a la red doméstica de cada empleado.
Se recomienda asegurar la existencia de un firewall como primera línea de defensa para la red doméstica. Y, para mejorar esta protección, también se recomienda instalar un DLP (Data Loss Prevention) y un EDR (Endpoint Detection and Response) en los equipos que utilizan los profesionales, como forma de prevenir y monitorear la fuga de datos. Datos, así como protección contra comportamientos sospechosos y posibles ciberataques.
Además, en el trabajo de la oficina o en la casa, los empleados deben acceder tanto a la red como a las aplicaciones corporativas exclusivamente a través de VPN, ya que esto mantiene cifrados los datos que viajan entre la empresa y el hogar del empleado. Otro punto importante es asegurar la correcta gestión de accesos y identidades, incluso en entornos de nube, prestando especial atención a la gestión de permisos de acceso, ya que los errores en este proceso aumentan el riesgo de accesos no autorizados o fuga de datos. En estos casos también existen tecnologías que ayudan en esta gestión y visibilidad, incluidas las políticas de seguridad aplicadas a los entornos.
Sin embargo, podemos ver que, de cara al momento actual, se han producido muchos cambios y las empresas se han adaptado rápidamente para mantenerse activas, estableciendo nuevos modelos operativos, nuevas oportunidades de ganancias y centrándose en la reducción de costes. Pero también es importante establecer un modelo de ciberseguridad adecuado a este nuevo escenario, evitando amenazas y mitigando los riesgos inherentes a estos nuevos modelos.
Para este desafío, cuente con alianzas consistentes que ofrezcan tecnologías adecuadas y eficientes para lograr buenas prácticas de seguridad, elevando el nivel de madurez dentro de la organización.