Analítica predictiva y prescriptiva, el secreto para potenciar las labores de ciberseguridad a nivel empresarial

La analítica, cimentada sobre el raciocinio matemático y la estadística, ha adquirido un gran protagonismo en los últimos años. Existen diversos tipos, como la predictiva y la prescriptiva. Ambas han sido tendencia aplicativa en la operatividad de tecnologías como el Robotic Process Automatization (RPA), la Inteligencia Artificial (IA) y el Internet de las Cosas (IoT), pues permiten hacer una lectura minuciosa de patrones determinados para formular respuestas semiautomatizadas que sean oportunas a cada contexto.

Antes de continuar, es pertinente diferenciar ambos tipos de analítica. La predictiva hace referencia a la predicción de un determinado comportamiento, ya sea individual o colectivo, y para lograrlo se suelen emplear sistemas como el poder de cómputo en la nube, las máquinas de vectores de soporte y las redes neurales para diseñar modelos que pronostiquen un patrón determinado de consumo en los clientes, por dar un ejemplo. Este método de análisis avanzado, además de utilizar datos nuevos e históricos para predecir la actividad futura, el comportamiento y las tendencias, se caracteriza por nacer de la lectura constante de una gran cantidad de datos y variables.

La analítica prescriptiva, por su parte, no solo permite saber qué pasará en un futuro, sino formular pasos y acciones estratégicas para encarar los eventos identificados. Para cumplir con este propósito, suele apoyarse en tecnologías que permiten producir respuestas en tiempo real, como el big data.

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Analítica en la ciberseguridad

Hay un campo en el que la analítica predictiva y prescriptiva no han sido formalmente aplicadas: la ciberseguridad. Entendida como el conjunto de prácticas y tecnologías destinadas a garantizar la seguridad digital de un individuo o compañía, la ciberseguridad se ha convertido en un importante factor de competitividad y confianza para las organizaciones.

La analítica, tanto predictiva como prescriptiva, permite reducir el margen de ataques cibernéticos y adoptar un enfoque más preventivo. La primera, por ejemplo, facilita el rastreo y monitoreo de los ciberdelitos, detallando al mismo tiempo futuras probabilidades de ataques. De igual forma, además de promover buenas prácticas de performance digital en las personas, puede visualizar cuáles son los puntos exactos más vulnerables en los que el cibercriminal se focalizará.

Ante ese panorama, la analítica predictiva y prescriptiva pueden ayudar a potenciar las diversas soluciones de ciberseguridad al identificar, en primer lugar, los escenarios y situaciones vulnerables que los cibercriminales más suelen aprovechar, para luego formular acciones estratégicas que mitiguen los riesgos y garanticen una seguridad digital alta y sofisticada al interior de las empresas.

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Un ejemplo de lo anterior deviene del trabajo remoto. Diversos expertos han alertado que el ciberdelito aumentó durante esta modalidad laboral principalmente por la poca capacitación de los empleados sobre buenas prácticas digitales; la seguridad deficiente de las conexiones domésticas; y la ausencia de soluciones eficientes especializadas de ciberseguridad. De hecho, de acuerdo con André Futuro, Head of Business and Development Cybersecurity de TIVIT, el ciberdelito crecerá entre un 200% y 250% en 2021, considerando que el trabajo remoto y la digitalización de los negocios continúan fortaleciéndose a nivel regional.

Con el fin de hacer frente a esta realidad, y después de realizar un ejercicio de análisis prescriptivo, los especialistas recomiendan adquirir soluciones como la que TIVIT ofrece ya que, a través de cinco focos de acción bien planificados, permite mitigar el riesgo de ciberataque a las organizaciones en un 90%.

Para que la analítica predictiva y prescriptiva potencien las labores de ciberseguridad, es crucial contar con grandes volúmenes de datos, materia prima de estos enfoques. Por ello, las organizaciones deben tener una documentación corporativa bien organizada, a la mano y protegida que permita analizar cuáles han sido los puntos vulnerables de la compañía en materia de seguridad digital y cómo se puede actuar para fortalecerlos.

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