¿Cómo la digitalización determina nuevas reglas de competencia en el mundo corporativo?

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Para atender a un nuevo tipo de público las empresas necesitan repensar su forma de lidiar con la tecnología.

La transformación digital cambió completamente nuestra forma de vivir haciendo que muchos eventos de nuestro día a día sean guiados por nuevos hábitos, y no hablo solamente como alguien que fundó una empresa de Tecnología y que por lo tanto está completamente conectado a este universo, sino que hablo en forma general.

¿Quieres ver ejemplos con los cuáles te identificarás totalmente? Piensa en tu día a día y en cómo la tecnología está presente en forma natural.

Cada día te levantas con el despertador del celular, miras tu agenda para recordar los compromisos, chequeas los primeros emails y lees o miras algunas noticias del día mientras desayunas. Sales de casa para tus compromisos. Si vas en auto probablemente estarás siguiendo el GPS o confiriendo la mejor ruta sin tránsito en  Waze. En el escritorio, pasas la mayor parte del tiempo resolviendo asuntos en frente al computador y haces reuniones por Skype.

Si tienes ganas de almorzar en un lugar diferente accedes a Google Maps para ver las sugerencias más cercanas, pero si quieres pedir un delivery, una app también puede indicarte  promociones más acertadas para tu región. Son tecnologías que entran en la palma de tu mano por todos lados y, si te das cuenta, hablamos únicamente de una mañana. ¿Te imaginas el resto del día?

Ahora, te preguntarás cómo tiene esto que ver con las empresas y cómo todos estos cambios impactan internamente en la forma de pensar el modelo de trabajo. Bien, a pesar de parecer impensable, muchas aún no están familiarizadas con la era digital.

Otro punto positivo que merece destacarse es que ya tenemos una gran evolución en la modernización de los procesos internos y de los modelos de negocio en pro de la digitalización. El uso de la Tecnología de Información dejó de ser considerado importante solamente cuando el asunto es puramente técnico, pasando a ser un recurso estratégico en análisis más amplios de servicios ofrecidos para los más diversos sectores.

En términos corporativos — hablando de la automatización; de la racionalización y de la calificación de procesos, insumos y del capital humano y creativo—, la digitalización integrará mejor los departamentos y permitirá que la información fluya de manera más eficiente internamente y con los clientes, proveedores y demás stakeholders de tu organización. 

Además, la monitorización de informaciones provenientes de colaboradores, del mercado y de las redes sociales, genera un banco de datos que se transforma esencialmente en inteligencia que es la principal materia prima para la toma de decisiones estratégicas.

La edición 2017 de la encuesta State of the CIO, conducida anualmente por el IDG Enterprise, ayuda a comprobar esta tendencia. De los 646 CIOs entrevistados, el 82% afirmaron estar mucho menos involucrados en actividades operacionales como el control de costos dedicando más tiempo y energía a trazar estrategias para diferenciación competitiva, por ejemplo. Este número hace cerca de tres años era de 53%.

Las empresas necesitan entender lo esencial qué es reinventarse constantemente para continuar ofreciendo servicios de calidad que atiendan las nuevas exigencias y comportamientos humanos, un asunto válido para los procesos internos también. 

Al final, el mismo consumidor habituado a todas esas posibilidades móviles y de conectividad  también es colaborador en el cuadro de tu empresa. Esa nueva forma de pensar y ver la tecnología digital en los negocios es una actitud en el presente que define el camino del futuro.