Para una eficiente planeación y diseño de su jornada del viaje hacia la nube, es necesario considerar la transformación de su modelo tecnológico mientras el proceso evoluciona. Es bueno recordar siempre que la nube se centra en la alta disponibilidad, confiabilidad y automatización.
Elementos como: la infraestructura mínima, equipos pequeños, flexibilidad y acceso rápido a la tecnología de punta, están entre las ventajas ofrecidas por esa tecnología. ¿Y cómo saber si mi empresa ya debe iniciar esa jornada?
Para apoyar a su empresa en esta decisión, seleccionamos los 3 elementos primordiales que usted no puede ignorar cuando está iniciando la jornada del viaje hacia la nube, ¡empecemos!
1- ¿La necesidad de integrar los servicios de nube está alineadas a mis negocios?
En esta etapa es fundamental responder algunas cuestiones primordiales: ¿Existe alineación entre las necesidades de la empresa y los beneficios ofrecidos por la nube? ¿Mi empresa tiene demanda de servicio que justifique este cambio? ¿Los equipos están preparados para actuar con eficiencia en este escenario?
Antes de iniciar la búsqueda por el proveedor ideal, trate de responder las cuestiones. Estas pueden determinar no apenas una migración exitosa, sino que su empresa pueda obtener ventajas competitivas y operacionales que se esperan con la adopción de la nube.
Observe cómo es la productividad de su empresa, si usted trabaja con datos confidenciales, si necesita que sus archivos tengan alta disponibilidad o que sean accedidos remotamente, entonces una solución en nube puede mejorar la disponibilidad y seguridad de su empresa. Estos son apenas algunos ejemplos de lo que es importante tener en mente en el momento de su planificación.
2- ¿Qué debo hacer con los sistemas legados?
Evitar inversiones indebidas es una de las principales preocupaciones dentro de las organizaciones, con TI no es diferente. Algunas empresas poseen sistemas críticos que fueron personalizados para el negocio.
Esos sistemas suelen generar un alto costo técnico y también operacional, por eso pueden evitar actualizaciones y migraciones, además de exigir un gran esfuerzo para la implementación.
En situaciones como esta, es importante evaluar cuál es el mejor camino para solucionar los desafíos de la empresa. Dependiendo de la edad y de las restricciones del sistema usted puede sustituir, cambiar el sistema por uno nuevo, tratar de evolucionar y llevar el legado a un nivel superior de rendimiento o hasta a conectarse.
Cuando hablamos de conectarse, nos referimos a permitir que la base del sistema permanezca inalterada pero nuevas herramientas y funcionalidades sean ofrecidas por servicios en nube. No es una opción disponible para todas las empresas y sistemas, por tener algunas limitaciones técnicas que varían de caso a caso, pero es una buena alternativa para la toma de decisión.
3- Conozca bien su ambiente
Después de considerar las cuestiones de los sistemas legados (si existen) y establecer que la nube es una solución que contribuirá con su empresa, evaluaremos las características del nuevo ambiente.
Tipos de datos almacenados y sus sistemas de protección, herramientas de monitorización, características de integración de acuerdo con el tipo de nube elegida y espacio de almacenamiento así como banda de transferencia, son puntos importantes a considerar, a fin de anticiparse a eventuales obstáculos.
Naturalmente, es necesario que usted conozca muy bien su ambiente local de TI, con datos precisos y actuales sobre su situación de red, servidores, volumen almacenado, cantidad de accesos, prioridad y riesgo de datos almacenados etc., a fin de poder escalar adecuadamente su migración para un sistema que será efectivo desde el inicio.
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